La Generalitat de Cataluña, mediante el Departamento de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentación, reclama insistentemente desde hace 6 meses la deuda que el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (MAGRAMA) tiene pendiente con las administraciones con competencias en el río Ebro para poder ejecutar de manera urgente las actuaciones contra el caracol manzana previstas en el tramo Amposta-Tortosa que deben permitir la contención de la invasión del tornillo desde el río hacia los campos de cultivo.
Las actuaciones fueron presupuestadas en 261.386,71 euros a la reunión del plan de lucha contra el caracol manzana llevada a cabo en Amposta el pasado mes de agosto entre todas las administraciones implicadas en la erradicación de esta especie invasora, y así se hizo saber al MAGRAMA unos días después.
La consejera Meritxell Serret también trasladó la reclamación a la ministra Isabel García Tejerina en el marco de la Conferencia Sectorial de Agricultura y Desarrollo Rural, celebrada hace apenas unas semanas en Madrid. Por otra parte, la directora general de Agricultura y Ganadería, Teresa Masjuan, también les pidió al director general de la Sanidad de la Producción Agraria el pasado 2 de marzo en la reunión de coordinación del plan de lucha contra el caracol manzana efectuada también en Madrid.
El Departamento de Agricultura de la Generalitat de Cataluña continúa argumentando ante el Ministerio que no tiene ningún sentido que haya de verter importantes esfuerzos en los campos de arroz y en las infraestructuras (canales, acequias, bombas, etcétera) si por otra parte las administraciones con competencias en el río Ebro no llevan a cabo aquello a lo que se han comprometido.
El DARP ha querido dejar bien claro al Ministerio que en ningún caso se pretende aleccionar sobre aquello de lo que no tiene competencias, pero que todo el mundo debe cumplir los compromisos y las responsabilidades que le corresponden, que la peligrosidad de una plaga como la del caracol manzana no puede ser menospreciada y que hay que actuar con contundencia, tal como ha recomendado la Comisión Europea (CE) misma.
El Departamento considera que sería deseable un gesto de buena voluntad del MAGRAMA y el resto de administraciones centrales con competencias en el río Ebro hacia los compromisos adquiridos, y se muestra firme en continuar su denunciando las carencias e incumplimientos.