La verdad es que el agua, como bien de primera necesidad, tiene muy mala suerte.
Cuando se habla de economía del agua se produce la siguiente paradoja: la gestión del agua adolece de principios económicos básicos. Salvo, el tan manido: “recuperación de costes”. Eso si, seguidos de un montón de retahílas. La mas famosa: “es necesario determinar cuáles son estos costes”. Como si no supiéramos todos los actores cuales son esos costes. Es la excusa perfecta para no actuar y no tomar decisiones.
Cuando se habla de tasas o tarifas me acuerdo de esas liebres que cuando ven una jauría de perros que se abalanzan sobre ellas para devorarlas, se ponen a discutir si son galgos o podencos. Los estéril de una discusión tan banal, acabara poniendo en riesgo su existencia.
Estoy empezando a creer que el “statu quo” actual le interesa a mucho de los actores. A los políticos porque cualquier acción en este campo solo le va a traer problemas a corto plazo (el largo ya se verá, piensa que, con suerte, se librarán. Ignoran que sus nietos lo tendrán que pagar con creces).
Los agricultores, principales consumidores, están encantados con el actual precio que pagan por el agua (ya veremos cuando llegue la sequía, que llegará) y por la, teórica, imposibilidad de pagar por la contaminación difusa que generan los nutrientes que utilizan.
Las empresas que gestionan los servicios porque cualquier movimiento en cualquier dirección puede mermar su actual cartera.
Los técnicos porque bastante tenemos con resolver el día a día y procurar, con los exiguos presupuestos que manejamos, que la calidad del servicio no decaiga.
Los usuarios porque solo les interesa la parte de abastecimiento. Sus cacas se las beben otros. Ignoran que todos estamos en un ciclo eterno de cacas.
Mientras, donde no hay agua es casi imposible que haya economía, por no decir vida.
Así que, estamos avisados. O Adoptamos criterios económicos a la gobernanza y la gestión del agua, o puede que nos encontremos sin economía y, lo que es peor, sin agua.
Y el primero de ellos es generar recursos económicos para garantizar la sostenibilidad del servicio de CIA y del riego. Y por favor, no empecemos a discutir sobre lo que es o no sostenibilidad. Otra discusión espuria no.
PD: ¿Saben cuanta agua tratada en plantas de tratamiento, donde se consume energía y productos químicos, se pierde y no llega al usuario?
¿Saben cuantos productos agrícolas, se quedan sin recoger después de haber consumido una gran cantidad de agua?
