La sociedad mercantil estatal Aguas de las Cuencas de España (ACUAES), del Ministerio para la Transición y el Reto Demográfico, ha iniciado las obras de la nueva depuradora de Silvouta, en Santiago de Compostela, en las que se estima que se van a invertir 60 millones de euros (IVA excluido).
El 8 de febrero se procedió al levantamiento de actas de expropiación. El 14 de febrero tuvo lugar la firma del acta de comprobación del replanteo y desde entonces se han desarrollado los trabajos de comprobaciones topográficas y gestión de autorizaciones, y se ha preparado la zona del campamento de obra.
Además, se han iniciado los trabajos de movimiento de tierras y explanación de la parcela exterior a la depuradora actual y los vaciados del pretratamiento y decantación primaria.
El plazo del contrato es de 27,5 meses de construcción, de manera que, a mediados del año 2026, la depuradora deberá estar en funcionamiento a pleno rendimiento.
Por otra parte, el Consejo de Administración de ACUAES, reunido hoy, ha autorizado la firma de una adenda al convenio suscrito el 5 de febrero de 2021 con la entidad pública empresarial Augas de Galicia y el Concello de Santiago de Compostela para la ejecución, financiación y explotación de la nueva depuradora de Silvouta.
La adenda eleva hasta en un 80% el porcentaje de financiación de los fondos Next Generation de la Unión Europea, frente al 65% que preveía el convenio suscrito en 2021, reduciendo por tanto las necesidades de aportación del Concello. Se mantiene la aportación de la Xunta de Galicia de 10,8 millones de euros, si bien se ajusta su calendario de aportaciones en virtud de la nueva previsión de ejecución y finalización de las obras.
Las obras, contratadas y dirigidas por ACUAES, permitirán solucionar los problemas de capacidad y obsolescencia técnica que presenta la actual depuradora y eliminar los vertidos contaminantes al río Sar. Una vez finalizadas, el Concello realizará su explotación.
La actuación incluye la construcción de una nueva depuradora, que tratará un caudal medio de 52.000 m³/día, así como la conexión a la red de colectores existentes y la ejecución de una nueva acometida eléctrica compatible con las necesidades energéticas de la nueva instalación y dotada de un suministro eléctrico de respaldo.
El proyecto de esta línea eléctrica se encuentra en su fase final de trámite de supervisión por parte de ACUAES, estimando su aprobación durante el mes de abril. Inmediatamente después, se licitarán las obras.
La nueva instalación contará con un tratamiento primario y de agua de tormentas mediante decantación lamelar y un tratamiento biológico por fangos activos, con membranas de ultrafiltración, que obtiene un vertido con calidad superior a la exigida para zona sensible. Para el tratamiento de los lodos se incluye digestión anaerobia con hidrólisis térmica, que permitirá la generación de energía para autoconsumo y el empleo en la agricultura de los lodos deshidratados.
Destaca el sistema de desodorización de última generación que permitirá una operación compatible con los usos que se desarrollan en su entorno.
