Los habitantes de la comunidad Boca de Coaque, localizada en el cantón Pedernales (Manabí), se beneficiaron con la construcción de un muro con piedras escolleras. La obra estuvo a cargo de la Secretaría del Agua.
Boca de Coaque está integrada por 47 familias, en su mayoría pescadores. La gente de este sector ha sido afectada durante varios años por las crecidas del río Coaque y por las marejadas del Océano Pacífico. Hoy este grupo de laboriosos manabitas se siente aliviado con una obra que crea un semicírculo protector.
Tilia Cabezas, madre y padre de familia a la vez, había perdido las esperanzas de una solución al problema y se sintió sorprendida cuando meses atrás llegaron los técnicos de la Secretaria del Agua con un ingeniero contratista para iniciar la construcción del muro, que finalmente hoy es una realidad.
Greco Vásquez, uno de los fundadores del sitio Boca de Coaque, aseguró que por no poseer otro sitio donde vivir con su familia no se fue del lugar y recordó que las inundaciones y las plagas eran constantes. “Ahora es diferente gracias al apoyo desinteresado de la rectora del agua, a quien agradezco por los trabajos”, subrayó.
El muro tiene 3 metros de alto, 440 metros de largo y su costo fue de 240 mil dólares, indicó John Pisco, constructor de la obra, quien agregó que no fue fácil instalar piedras en un sector donde el agua del río y de mar, unidos a la arena floja, no dejaban trabajar.