El día 30 se inició en París la 21ª Conferencia de las partes sobre el Cambio climático (#COP21), con el objetivo de avanzar en la lucha contra el cambio climático, mediante la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero, y que debe suponer una progresiva descarbonización de la economía. Desde el 30 de noviembre se reúnen hasta el 11 de diciembre representantes de 195 países. Esta concentración de jefes de estado y el hecho que sea en París, unos días después de los atentados del 13 de noviembre, ha tenido un amplio despliegue informativo e impacto en redes sociales.
El Protocolo de Kioto, de 1997, fijó las metas concretas de reducción de gases que debían acometer los países desarrollados. Pero esto solo vinculó a 37 estados, de los que 28 pertenecen a la UE, y que solo representan el 12 % de las emisiones globales. China se quedó fuera al no estar entre los países desarrollados, y USA no ratificó el protocolo. Kioto entró en vigor en 2005, y ha conseguido un 22 % de reducción en los países firmantes, muy por encima del 5% fijado como meta.
En el COP21 se pretende alcanzar un acuerdo que sustituya al de Kioto, que se empezaría a aplicar en 2020, y lo más importante, que sea vinculante.
Durante mi vida profesional he trabajo muchas veces con datos climáticos, y actualmente estoy en el comité de seguimiento del proyecto LIFE-MEDACC, de Adaptación de la Agricultura al Cambio climático (http://medacc-life.eu/es ). Dado que muchos medios están publicando noticias sobre la #COP21 y cambio climático, yo he querido realizar una entrada a título personal en mi Blog iagua, para explicar 3 ideas.
Temperatura vs Precipitación
En primer lugar destaco que las noticias se centran en el incremento de la temperatura, y de manera correcta la mayoría de noticias no hablan de la variable precipitación. En actos a los que he asistido, he oído a diferentes investigadores de prestigio que se puede hablar de incremento de temperaturas, pero que no se puede hacer lo mismo con la variable precipitación. En el punto 3 presento la evolución de los últimos 65 años de una serie de Temperaturas y precipitación. En todo caso, se ve un incremento de la variabilidad de las precipitaciones en condiciones de climas mediterráneos.
El controlar el incremento de temperaturas, pasa por la reducción de emisión de gases de efecto invernadero, y esto depende de las políticas que definan los diferentes países.
La cantidad de agua que discurre por nuestros ríos depende de las precipitaciones en forma de agua o nieve, pero también de la gestión forestal que se realice en las diferentes partes de la cuenca. El paso de prados de montaña a bosques más evolucionados, supone una reducción de la escorrentía que llega a los ríos, a la vez que también se incrementa la evapotranspiración de estos bosques. Las aportaciones de agua de las diferentes cuencas, dependen en primer lugar de la evolución del clima, y como se controle o se acelere el cambio climático. Pero también dependen de las políticas de gestión forestal.
Una de las principales funciones de los regadíos es la producción de alimentos. Y se debe abastecer de alimentos a una población cada vez mayor, debido tanto a la modificación de políticas de control de la natalidad como en China como al importante incremento de la esperanza de vida. En el escenario de mayores necesidades de alimentos, y precipitaciones más irregulares, es normal que aparezcan noticias que planteen futuros incrementos de infraestructuras de regulación.
Si hay Infraestructuras del Transporte, que con el paso de los años se deben ampliar. También se deberá analizar si, a pesar de un uso eficiente del agua de riego, se deben redimensionar determinadas infraestructuras hidráulicas asociadas a la producción de alimentos para garantizar la seguridad alimentaria futura.
Directiva Marco del Agua y Regadío.
Este verano estuve con mi familia en el Reino Unido, y un día nos acercamos a Londres. Comparto una foto que tomé de una persona que se estaba manifestando de manera personal por Londres. “Piensa en Grande, piensa en el Calentamiento Global”. Aunque esta persona se manifestaba individualmente, pienso que el problema del calentamiento global ya es asumido por una gran parte de la sociedad.
Figura núm 1. Foto Londres (8/8/2015).
Durante los días que estuvimos las lluvias fueron frecuentes, y generalmente la disponibilidad de agua para los cultivos en los países del norte de Europa, no se convierte en un factor limitante de producción. Esta es la principal explicación por la que España tiene un 30 % de la Superficie de Regadío de la Unión Europea, y en el resto de la UE el regadío no está extendido.
En diferentes ocasiones he escuchado que la actual Directiva Marco del agua está pensada con mentalidad de los países del Norte de Europa, y que no interioriza lo que aporta el regadío a la gestión del territorio, la producción de alimentos y a la economía de zonas con producciones estabilizadas.
Próximamente se revisará la Directiva Marco del Agua. A los representantes de nuestro país les pediría que se tuviera más en cuenta el papel del regadío en la DMA, y a los representantes del resto de países de Europa les pediría que pensaran en un posible escenario de cambio climático, en que la necesidad de regadío se desplace hacia el norte de Europa. Si tienen en cuenta esta posibilidad, es posible que vean el regadío como un tema mucho más estratégico para el conjunto de la UE.
Cambio Climático, Conservación de las aves y Cultivos.
Aunque se habla de calentamiento a nivel global, he dejado para el final un ejemplo que relaciona cambio climático, conservación de aves y cultivos, que equivale a producción de alimentos, en clave Local. En esta ocasión la clave local se centra en la zona del Segarra-Garrigues próxima a Tárrega.
Hace unos días, un buen amigo nos explicaba cómo la población de Sisón en esta se vio favorecida por las condiciones climáticas de la primavera del 2008. Después de este comentario, presento la información que he recopilado.
En primer lugar, he analizado las series históricas de Temperatura y Precipitación compartidas por el Servei Català de Meteorologia. Para la estación de Tàrrega, está disponible la precipitación, y las temperaturas mínimas y máximas, con una serie entre 1950 y 2014 (http://bit.ly/1jDlCzI).
En las siguientes figuras se representa la evolución de las 3 variables.
Figura núm 2. Evolución de la precipitación anual de la Estación Tàrrega. Datos meteocat.
Figura núm 3. Evolución de la precipitación del primer y segundo trimestre del año que de la Estación Tàrrega. Datos meteocat.
Figura núm 4. Evolución de la temperatura media de las máximas de la Estación Tàrrega. Datos meteocat.
Figura núm 5. Evolución de la temperatura media de las mínimas de la Estación Tàrrega. Datos meteocat.
Del análisis de los datos climáticos, mis principales conclusiones son:
- Existe irregularidad de las precipitaciones a los largo de la serie.
- Las precipitaciones del año 2007 provocaron una situación de alerta por sequía, y esta se puedo salvar por las importantes precipitaciones de abril y mayo de 2008.
- No se ha dispuesto de la temperatura media mensual, esta se puede estimar como semi suma de la temperatura media de las máximas y de las mínimas.
- En la figura de la temperatura de las máximas sí que se aprecia incremento de las temperaturas. Se ve como la temperatura media de las máximas sobre los 18,8ºC entre 1950 y 1980, y a partir de los años 80, existe una tendencia ascendente, superando los año 2011, 2012 y 2014 los 21ºC.
En la figura se representa la cría de polluelos de Sisón en la primera quincena de mayo, y la independencia de los polluelos la primera quincena de junio, 30 días después.
Figura núm 6. Temporalidad de la cría de Sisón. Presentación “Regadío Segarra-Garrigues, Delimitación de las Zepas y Prescripción de la Dia” Xavier Vall-llosera (Infraestructures.cat) Tàrrega 7/10/2015.
Como las crías del Sisón anidan en el cereal de invierno, todo lo que suponga un retraso de la cosecha supone una ayuda a recuperar la población de Sisón, porque en el momento de la siega los polluelos son más independientes. Esto se puede conseguir mediante medidas agronómicas (siembra más tardana, uso de variedades de ciclo más largo) o disponibilidad de agua para el cultivo, en forma de abundante lluvia como en 2008, o en forma de riego en primavera.
Debemos adaptarnos al cambio climático, conservar las aves, pero sin olvidar que debemos continuar produciendo alimentos, y que esto es pasa por mantener y ampliar la producción en regadío.
