Grandes presas en explotación en Tenerife [Archipiélago Canario]

Existen 113 grandes presas de embalse en explotación en las Islas Canarias, 73 de ellas en Gran Canaria. La pequeña isla de La Gomera tiene 24 mientras que Tenerife sólo tiene 12: un registro en función de la ubicación perpendicular del muro a un cauce de barranco, barranquillo o cañada y a sus dimensiones según normativa vigente [altura con cimientos superior a 15 metros]. 

A continuación aportamos para cada presa de embalse de Tenerife su nombre, el año de terminación de su construcción y/o reconocimiento final y su ubicación natural en un barranco, barranquillo o cañada. Un sencillo registro con un sólo objetivo: trasladar a los lectores la realidad espacial de nuestras magnas obras hidráulicas y su valoración histórica. 

Los datos estructurales de las presas que se incluyen en el registro son el tipo de presa [gravedad (PG), materiales sueltos (TE), bóveda (VA), contrafuertes (CB)]; la fábrica [mampostería (M), hormigón mamposteado (HM), hormigón (H), escollera (E)]; la planta [curva o recta]; su altura con cimientos en metros [en las que no se conoce se ofrece la altura sobre cauce]; y la longitud de su coronación en metros. También se añade su capacidad de embalse en Hm³ y la titularidad de la presa [pública o privada]. Se incluye en el registro unas observaciones especiales, destacando si son presas inacabadas, si han sido recrecidas, si son presas vertedero, si tienen cimentaciones singulares por su altura o por su perfil tipo (PT), si tienen expresión estética, etc. Y mediante la creación personal de una categoría técnica de reconocimiento cultural se registran aquellas grandes presas construidas en Tenerife que consideramos que son OBRAS HIDRÁULICAS DE GRAN INTERÉS CULTURAL [OHGIC].

Las presas más antiguas en el Archipiélago Canario son La Represa del Pinto (Gran Canaria), La Vieja de los Cocos (La Gomera) y la Presa de Tabares (Tenerife): piezas maestras del patrimonio hidráulico canario. Ninguna de estas viejas obras hidráulicas, con más de 100 años de historia, ha sido declarada Bien de Interés Cultural por las administraciones Canarias. Es incuestionable que en el Archipiélago Canario no hay una mirada cultural responsable de lo construido y en explotación en los cauces de los barrancos. Estas construcciones notables que salpican nuestros paisajes insulares tienen unas características generales interesantes: ausencia de galerías de visita, drenaje de la fábrica, desagüe de fondo y a veces de aliviadero de superficie. Sus mampuestos en gran parte de los casos tienen una densidad muy reducida. Muchas presas antiguas tienen una gran galería de limpia que podría actuar como desagüe de fondo en caso de emergencia. Algunos titulares condenaron estas galerías posteriormente, mientras que otros ni siquiera las llegaron a construir. Existen muchas presas antiguas inacabadas, numerosos recrecimientos sobre presas primitivas y un dominio de la planta curva frente a la recta. En lo que respecta a los materiales y a las tipologías, la transición ocurrió en la década de los 60: de presas de mampostería con mortero de cal o mixto pasó a construirse presas de hormigón mamposteado [algunas con grandes piedras] o de hormigón. 

El número de presas modernas que fueron construidas y terminadas bajo la tutela del Servicio de Vigilancia de Presas (a partir de 1964) también es numeroso e interesante. La única presa bóveda construida en Canarias está en Gran Canaria mientras que las presas de escollera se construyeron en la década de los 70: Tirajana y Siberio en Gran Canaria mientras que en La Gomera se construyeron las presas de Amalahuigue y Mulagua. Respecto a la isla de Tenerife, no hubo un proyecto óptimo unidad presa-terreno con la Presa de los Campitos. 

Expresión personal.