El informe se enmarca dentro del trabajo que realizan las organizaciones que conforman la Coalición de Organizaciones por el Derecho al Agua (CODA) y pretende aportar al conocimiento sobre las condiciones que favorecen u obstaculizan el cumplimiento del Derecho al agua potable y saneamiento básico sobre la base de la Observación General Nº 15 del Comité de Derechos Económicos, Sociales y Culturales, y de otros instrumentos nacionales e internacionales, que “el derecho humano al agua es el derecho de todas y todos a disponer de agua suficiente, salubre, aceptable, accesible y asequible para el uso personal y doméstico”.
Se hace énfasis en la problemática de la población rural y se sustenta en una sólida base de información primaria obtenida mediante una amplia encuesta aplicada a 1,342 hogares de 66 comunidades del país y entrevista a 61 Comités de Agua Potable y Saneamiento (CAPS).
El informe sostiene que accesibilidad y disponibilidad de agua en cantidad y calidad adecuada es, en efecto, necesaria para garantizar el respeto de numerosos derechos humanos fundamentales, entre los cuales el mismo derecho a la vida, el derecho a la alimentación, a estándares adecuados de vida, a la vivienda, el derecho a la autodeterminación, a la educación de la infancia, a menudo perjudicado por las precarias condiciones de salud a causa de la carencia de agua, de su distancia o de su mala calidad.
Algunos hallazgos importantes del Informe son:
- Disponibilidad: Un 27% de las familias entrevistadas recurre a puestos públicos o ojos de agua, arroyos o ríos, de manera que no se garantiza una fuente segura de agua. Hay otro 4% de las familias, cuya situación es de extrema vulnerabilidad al tener que comprar el agua, recurrir a vecinos y en los casos posibles, recoger el agua de lluvia. 56% de los hogares tienen sistema de tubería, pero al cruzar los indicadores de frecuencia y continuidad, resulta un 37,52% de hogares con tubería y con agua diaria.
- Accesibilidad: Del total de familias que cuentan con un sistema de tubería en casa o patio, el 40% se ve obligado a acarrear agua de otros lugares debido a la discontinuidad del servicio. Un 20% de los casos afirma que el camino a recorrer para la búsqueda de agua es inseguro, debido al aislamiento y al mal estado. La mayoría de los hogares enfatiza las dificultades que acarrear agua implica para poder cumplir con las tareas domésticas, sobre todo para las personas que se encargan de ello, fundamentalmente las mujeres y los niños y niñas.
- Accesibilidad económica: Los costos más altos derivados de la adquisición del agua se registran en aquellos lugares donde no está presente ENACAL, ni hay CAPS. Eso implica que los hogares tienen que comprar el agua. Un 53% afirma haber tenido o tener en la actualidad algún tipo de dificultad para pagar las cuotas mensuales de agua.
- No discriminación y atención a grupos vulnerables: La mayoría de los casos hacen referencia a los niños y niñas como las personas que más sufren la escasez de agua, sobre todo por lo que implica de riesgo para la salud, falta de aseo o absentismo escolar. Asimismo, otro porcentaje de hogares señala a las mujeres como las más perjudicadas, debido a que son ellas las que se dedican a las labores domésticas y las que también se encargan de acarrear agua.
- Calidad: La peor calidad se registra en los hogares que se abastecen en puestos y pozos públicos o que recurren a ojos de agua o ríos. Siete de cada 10 hogares evalúan la calidad del agua por el aspecto físico que tiene y por su olor y sabor. Solo el 22% ha recibido alguna información de las autoridades locales en cuanto a la calidad del agua.
- Sistema de saneamiento y eliminación de basura: El 88% de los hogares encuestados señala que disponen de letrina. Un 4% señala tener inodoro, pero algunos de ellos afirman que el inodoro descarga directamente al rio. Los hogares que carecen de servicio higiénico se encuentran concentrados en la zona Norte y en los municipios de las Regiones Autónomas. Los hogares eliminan la basura fundamentalmente mediante la quema y tirándola a predios baldíos. Hay también un 16% de hogares que entierra la basura.
Información y participación
Es significativa la cantidad de hogares que desconocen quienes administran el agua o se encargan de su gestión o mantenimiento que, junto a los que no contestan. Apenas el 2,6% de las personas entrevistadas ha participado directamente en alguna forma de movilización para ejercer y reclamar su derecho al agua. Tres de cada 10 hogares señalan que son las mujeres las que más se involucran en las actividades relacionadas con la organización y gestión del agua (sobre todo en las capacitaciones, las movilizaciones o marchas, la elaboración de proyectos y la gestión con los gobiernos locales).
Como parte del compromiso asumido y ante el desafío de que el derecho al agua se convierta en una realidad para toda la población de Nicaragua, se presentó el informe, esperando que sirva para profundizar en un debate que apenas está iniciando, un debate que debe estar fundamentado en el conocimiento de las condiciones reales que dificultan o favorecen el ejercicio de derecho al agua y saneamiento de parte de la mayoría de los sectores rurales empobrecidos del país.
El estudio fue financiado por diferentes organizaciones como La Cuculmeca, Ingeniería Sin Fronteras (ISF), Grupo de Promoción de la Agricultura Ecológico (GPAE), Red Centroamericana de Acción del Agua, DFID, UKAID y SIMAS.
Ver capítulos 1 y 2 del informe
Fuente.- Alianza por el Agua