La alcaldesa de Alzira, Elena Bastidas, y el Consejero Delegado del Grupo Aguas de Valencia, Dionisio García Comín, han inaugurado las instalaciones de una planta de filtros de carbón activo que se ha construido en la ciudad. Con estas nuevas instalaciones Alzira resuelve los problemas de calidad de agua que se detectaron hace algunos meses por presencia de plaguicidas.
Tanto la alcaldesa como el consejero delegado han coincidido en calificar esta planta como vital para la ciudad y han destacado que se ha ejecutado con celeridad para dar respuesta eficaz a los ciudadanos. La inversión que se ha realizado es de unos 700.000 euros asumidos por Aguas de Valencia tras acuerdo con el propio ayuntamiento. En este sentido, cabe destacar que en ningún caso repercutirá en la tarifa del agua.
La planta tiene capacidad para tratar la totalidad del agua que se suministra en Alzira, que es de unos 11.000 metros cúbicos diarios
Han destacado que hubo que atender con celeridad el problema en la calidad del agua que se detectó en el mes de febrero y en un tiempo récord de tres meses ya se puso en funcionamiento. “Es una obra vital para la ciudad de Alzira” ha asegurado la alcaldesa que permiten terminar el año con “soluciones”.
El Consejero Delegado de la empresa, Dionisio García Comín, ha destacado que la planta tiene capacidad para tratar la totalidad del agua que se suministra en Alzira que es de unos 11.000 metros cúbicos diarios.
El sistema de filtración que emplea la planta se compone de tres foltros de 2500 mm de diámetro de carbón activo granulado. Tiene la propiedad de absorción de los plaguicidas eliminando su presencia tras un tiempo de contacto con el agua bruta. En el caso de Alzira, tiene tres líneas y cada una de ellas puede trabajar de manera independiente. En la actualidad, el Grupo Aguas de Valencia ha construido una planta de características similares en Carcaixent y esta redactando proyectos para otros tantos municipios.
Problemas de plaguicidas, solución
Cabe recordar que fue a finales del mes de febrero cuando se detectó en las analíticas realizadas un índice elevado de plaguicidas, por encima de lo permitido en la normativa vigente. Desde ese momento, en el que el agua es declarada no opta para el consumo para la bebida y elaboración de alimentos, el ayuntamiento de Alzira se puso en marcha para dar una respuesta eficaz y rápida. De manera transitoria el ayuntamiento de Carcaixent cedió plantas móviles de ósmosis mientras Aguas de Valencia redactó el proyecto de la planta que fue presentado en el Ayuntamiento la primera semana de marzo. Tres meses después la planta ya entra en funcionamiento.
