(UN) La sequía dañó la producción mundial de cereales y contribuyó al alza de los precios de los alimentos. Es clave modernizar los sistemas de producción agrícola para que optimicen el uso del agua.
Este es uno de los principales mensajes que la Organización de la ONU para la Alimentación y la Agricultura (FAO) lanzó hoy con motivo de la Semana Mundial del Agua que se celebra en Estocolmo, Suecia.
Responsables políticos y expertos de todo el mundo debatirán sobre cuestiones urgentes relacionadas con la gestión de ese recurso natural.
En el marco de la ceremonia de apertura de la Semana, el Director General de la FAO, José Graziano da Silva, recordó que no hay seguridad alimentaria sin seguridad hídrica.
"Tenemos que producir de manera que se conserve el agua, se utilice de manera más sostenible e inteligente, y ayude a la agricultura a adaptarse al cambio climático", explicó da Silva.
En ese sentido, señaló la importancia de modernizar el riego por canales de los cultivos y hacerlo subterráneo, y almacenar el agua de lluvia en estanques.
